El desarrollo de la Inteligencia artificial ha pasado por varias etapas históricas. En ellas se refleja el momento histórico, el avance tecnológico y la visión del mundo de cada época. En la década de los cincuentas la propuesta de Alan Turing era solamente que una maquina engañara a un ser humano para que no la pudiese diferenciar entre hombre o computadora. Además el desarrollo tecnológico parecía llevar a equipos de cómputo que ocupaban enormes salas. Los seres humanos se conectaban a ella a través de terminales básicas.
Los sistemas de Inteligencia Artificial eran, basados en ese enfoque, fácilmente identificables, pues debían estar instalados en enormes equipos y las aplicaciones estaban orientadas a muy pocas opciones, como juegos de ajedrez, charlas hombre-máquina, control industrial, etc.
En las décadas siguientes y a pesar de los avances en hardware, los promisorios resultados no se dieron y se veía aún lejano el momento en que as maquinas compitieran con el ser humano. Solo en los cuentos, libros y películas de ciencia ficción ocurría y de forma ordenada. La literatura y la cinematografía de las décadas de los sesentas y setentas nos dan algunos ejemplos de cómo se veía el futuro de la I.A.
«2001: una odisea en el espacio» de Arthur Clark muestran a Hal, una computadora que toma control de una nave espacial y cuestiona su propósito. En un espacio cerrado se desarrolla el conflicto maquina-hombre. La disyuntiva de Hal es que debe seleccionar entre la importantísima misión o la protección de la vida humana.
En «Coloso», dos computadoras, una estadounidense y otra rusa, luchando por la supremacía mundial terminan uniéndose contra la humanidad. En su inteligencia se dieron cuenta que el peligro real del mundo no eran ellos sino el propio hombre. Sigue leyendo